Empecemos con la reina - bruja. Esa mujer tenía un grave problema de autoestima: ¡Hablar con el reflejo de su espejo, diciéndose a si misma que es la mas guapa!¡Cómo si el espejo pudiera responderle (yo al menos no he visto nunca un espejo hablador ¬¬)! Y además era bipolar: Reina narcicísta de día, bruja vendedora de fruta transgénica de noche. ¡Si señor! Con lo fácil que es llevar una doble vida... Y la tía era tan rata que no pagaba a una mujer de la limpieza, sino que tenía que obligar a Blancanieves a que le limpiara el castillo entero.¿Y no se supone que es una bruja? ¿Entonces que coño hace dándole una manzana a Blancanieves para matarla pudiendo lanzarle un hechizo y descuajeringarla viva? Ésta es como el lobo de Caperucita Roja, que se complica mucho la vida...
Y los enanitos. Siete hombres maduros viviendo solos en una casa, sin esposa y sin dinero para señoritas de compañía (en pocas palabras, putas), ¿Qué le harían a Blancanieves? Yo ya me imagino las horjías que debían montarse entre todos...
1_Un enanito por delante.
2_Un enanito por detrás.
3_ Un enanito en la boca.
4_ Un enanito en los pechos.
5_ Un enanito en la mano derecha.
6_Un enanito en la mano izquierda.
7_El otro mirando mientras se toca, porque es gay.
Uyuyuyuyuyuy...
Pero el que realmente se llevó el lote fue el príncipe. ¿Qué hombre no sueña con llevarse a una pivita a su casa solo por darle un besito de buenos días? Lo cierto es que a mí este tipo de cuentos siempre me han parecido muy machistas. Hasta que no aparece el macho cabrío del príncipe, no llega el final feliz.